La plataforma 'Salvar Torrelavega de una ZBE Ruinosa' ha presentado al Ayuntamiento alegaciones contra la ordenanza reguladora de la zona de bajas emisiones (ZBE) del municipio, en las que solicita que antes de su implantación se elabore un informe "con el máximo detalle" que analice el impacto socioeconómico que tendrá en la ciudad.
El colectivo, compuesto por comerciantes, hosteleros y empresarios, reivindica que se posponga la aprobación de la ZBE hasta que se conozcan públicamente los detalles del citado informe de impacto socioeconómico, ya que defienden que la ciudad es "una importante cabecera de comarca" que necesita facilitar el acceso al centro a los más de 200.000 personas que acuden de fuera del municipio a realizar compras o gestiones.
Así, en sus alegaciones, formuladas dentro del plazo de consulta pública abierto por el Consistorio antes de llevar la delimitación de la ZBE a su aprobación en el pleno, piden al Ayuntamiento una "reducción drástica" de los 200.000 metros cuadrados fijados para la zona de bajas emisiones.
El portavoz de la plataforma, Ángel Herreros, ha argumentado que Torrelavega ya posee "una gran extensión" de calles peatonalizadas que configuran las "tres grandes súper manzanas", además de que cuenta con el Bulevar Ronda que redistribuye el tráfico desviando los "miles de coches" del casco urbano.
Además, ha remarcado que la ciudad tiene en la actualidad "una muy buena calidad del aire", según datos aportados por el Centro de Investigación del Medio AMbiente (CIMA), "con un nivel de emisiones muy por debajo de otros municipios", lo que considera un motivo "más que suficiente para aprobar una reducción muy considerable" de la opción de ZBE propuesta por la empresa de consultoría Doymo.
Otra alegación solicita que la nueva propuesta de ZBE no inclya limitaciones de acceso a vehículos a las calles Francisco Díaz y su continuación por Joaquín Hoyos ni a la calle Ruiz Tagle, por considerar que son "calles fundamentales" para evitar los problemas de circulación y acceso, que afectarían "de forma dramática a más del 60% de los ciudadanos de otros municipios que a diario acuden a Torrelavega" a realizar sus compras, ocio y gestiones.
Junto a ello se reclama que antes de poner en funcionamiento la zona de bajas emisiones se proceda al "necesario fortalecimiento" del Torrebus, y se espere a que entre en servicio el futuro aparcamiento en altura de La Carmencita.
Herreros ha defendido que todas las medidas contempladas en las alegaciones tratan de evitar "un gravísimo perjuicio económico" a los comerciantes, hosteleros, autónomos, profesionales de toda índole y pequeños empresarios, quienes "verán reducidos sus ingresos de forma drástica" si se impide el acceso de un gran número de vehículos a las calles céntricas de la ciudad.
