El Gobierno de Cantabria seguirá "muy atento" para defender y proteger todo el patrimonio subterráneo rupestre, un referente de la región, que hay que seguir potenciando y dando a conocer fuera de Cantabria. Así lo ha asegurado la consejera de consejera de Presidencia,, Isabel Urrutia, durante su participación en los actos conmemorativos del 120 aniversario del descubrimiento de la cueva Hornos de la Peña por Hermilio Alcalde del Río.
Urrutia, que se ha referido al día de hoy como "muy especial", ha escenificado el apoyo del Gobierno de Cantabria porque es importante "poner en valor el patrimonio regional" y apoyar iniciativas como la que ha tenido el Ayuntamiento de San Felices de Buelna para recordar la historia de esta "magnífica cavidad", declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2008, junto a otras ocho cuevas más con arte paleolítico.
Iniciativas de este tipo, ha subrayado Urrutia, además de poner en el mapa a Cantabria como uno de los lugares claves del arte rupestre en el mundo, son un importante elemento dinamizador económico y social del mundo rural, puesto que muestran "lo bueno de los pueblos y las grandes posibilidades" que ofrecen.
"A veces estas iniciativas atraen mucha gente, fomentan negocio y dan a conocer los pueblos y sus grandes posibilidades, lo bonito que es vivir en el entorno rural y, además, las pocas distancias que hay en Cantabria", ha dicho.
Por eso el Gobierno de Cantabria trabaja "intensamente" para luchar contra la despoblación, ha subrayado, señalando que el presupuesto de Cantabria para 2024 "tendrá muy presente este problema" y promoverá, por ejemplo, ayudas para la rehabilitación de las viviendas en municipios de en peligro de despoblación.
Por su parte, el alcalde del municipio, José Antonio Cobo, tras señalar que Hornos de la Peña "no es una cueva cualquiera", ha manifestado su "enorme alegría y orgullo" por poder celebrar la efemérides, precisamente hoy, 27 de octubre, justo el día en el que un eminente arqueólogo de Torrelavega, Alcalde del Río, descubrió uno de los bienes más preciados del municipio.
UN MURAL QUE RECREA LA CUEVA
Además del acto central que ha tenido lugar este viernes, se ha aprovechado el 120 aniversario para inaugurar un mural pintado en la fachada sur del Ayuntamiento, que es la reproducción del interior de la cueva, y realizar una ofrenda floral en la propia cavidad.
El mural, colocado en uno de los lugares más visibles de San Felices es "una obra que trasciende la mera reproducción y se acerca mucho al arte en su máxima expresión", según el alcalde.
Realizado por los artistas Iván Calvo y Daniel Revenga, del grupo artístico Actus Reus de Torrelavega, se engloba dentro de un proyecto denominado 'Enseñando el alma de la cueva', dedicado al arte rupestre, que ya ha llevado a cabo otras representaciones en Ramales de la Victoria, Puente Viesgo o Altamira.
Los autores del mural han explicado que se trata "de seguir el camino de los antiguos, representando sus obras en el exterior, para que la gente las pueda ver".
Además, se han inaugurado las letras institucionales que representarán a San Felices de Buelna, y otro mural obra de Ludovico Rodríguez Liaño, quien fuera guía de la cavidad durante décadas, pintado en el pabellón polideportivo de la localidad.
El programa de actos se complementa con un ciclo de conferencias, que dieron comienzo el miércoles, y una serie de actividades que buscan implicar a niños y jóvenes en el conocimiento y difusión de este patrimonio cultural.
De hecho, está tarde tendrá lugar en el auditorio municipal de San Felices la conferencia `El santuario olvidado', a cargo de la doctora de la Universidad de Salamanca, Olivia Rivero.
Mañana sábado continuarán los talleres en el pabellón José Antonio González Linares y en el parque de la Lama. En concreto, habrá un taller de prehistoria, con elaboración de pinturas y armas, a cargo de Saúl Fernández, experto natural de San Felices, y de su compañero, el vasco José Julián Márquez
HORNOS DE LA PEÑA
La amplitud e insolación del vestíbulo de esta cavidad fueron atractivos para los últimos grupos de Neardentales y los primeros Homo Sapiens, que ocuparon su zona más exterior, como lugar de habitación. En momentos más recientes, durante la Edad del Cobre e incluso durante la Guerra Civil, se hizo uso de este espacio subterráneo con fines diversos.
Hornos de la Peña muestra uno de los conjuntos de grabados más completos de la región cantábrica. Las primeras figuras, algunas hoy desaparecidas, se sitúan en la zona exterior, y en este espacio que alberga el vestíbulo destacan un caballo de surco ancho y profundo.
Asimismo, cuenta con figuras de tamaño grande y concepción naturalista: caballos, bisontes, uros, cabras, ciervos, un bisonte, un posible reno y una forma serpentiforme que demuestran un conocimiento preciso de la anatomía animal, aunque el motivo más destacado es un antropomorfo con un brazo levantado y una larga cola.
Especialmente las diferencias técnicas, en complementariedad con la concepción estilística de las figuras, permiten apuntar la existencia de dos momentos de grabación. Una primera fase arcaica en correspondencia con las figuras exteriores de ejecución mediante abrasión y cuya cronología se puede remontar hace al menos 18.000 años, y un segundo momento, al que correspondería la mayor parte de las figuras interiores, cuya cronología magdaleniense debe estar próxima a unos 13.000 años A.C.
