La presencia campurriana se deja notar en la tractorada de Santander

Ganaderos a punto de iniciar la tractorada el pasado viernes
photo_camera Ganaderos a punto de iniciar la tractorada el pasado viernes

Veinticinco tractores de Campoo, aproximadamente, y muchos otros vecinos de la comarca que se desplazaron por otros medios, desfilaron el viernes por las calles de Santander. Ganaderos y agricultores que colapsaron la ciudad, incluso una treintena de ellos pernoctaron por la noche en el Paseo de Pereda.

El primer tractor en llegar a las 8 y diez de la mañana al lugar de salida, en la Avenida Eduardo García del Río, fue el de Emilio Macho Balbás, ganadero de Requejo que tuvo el placer de abrir el desfile.

No le faltaron méritos para encabezar una hilera ordenada de unos 250 tractores y otros vehículos de acompañamiento, porque en el morro del tractor portaba una parodia: la figura de un lobo merodeando a unas gallinas vivas que fueron colocadas sobre la plataforma, y el muñeco de una mujer rural espantando al animal.

Casi no veíamos la cabina de su tractor, porque acompañaba un cartel de grandes dimensiones, en el que se leía: “Lobos hasta en la cocina, ¡nos llevais a la ruina!”, y “No a la Agenda 2030”. Sobre la plataforma de un segundo tractor, también de la Ganadería Macho Balbás, se portó a un potro que esta semana fue devorado por los lobos. El segundo cartel leía: “Día sí, día también”.

La desesperación de los hermanos Macho Balbás con los lobos es total; porque Requejo está a poco más de un kilómetro de Reinosa, y porque “tenemos que estar pendientes de los constantes ataques a nuestros animales, muy cerca de las cuadras, teniendo que encerrarlos a una hora temprana”.

Emilio Macho que antes de comenzar el desfile tenía su lógica inquietud, ya que señaló, “queremos que todo salga bien”; valora para el Comarcal de Campoo el resultado de las dos tractoradas en las que ha participado, los días 11 y 16,  como de “un rotundo éxito”: la primera  el domingo en Reinosa, y ésta segunda el viernes, en Santander.

“En ambas queremos destacar el comportamiento ejemplar de los ganaderos de Cantabria, que hemos dado una lección de saber estar”. Los ganaderos y agricultores de la región van a seguir luchando, por unos derechos que afectan a la ciudadanía en general, porque “el campo somos todos”, “con problemas visibles como el del lobo, la plantación de nuestros agricultores, o entendiendo que la subida de los precios de los alimentos afecta el bolsillo de todos los ciudadanos”.

Por último, tanto los ganaderos y agricultores del sur de Cantabria, como del resto de la región, “hemos participado en una protesta pacífica que refleja la diversidad del sector primario, que defiende nuestra agricultura y ganadería familiar y exige unos precios justos en nuestros productos”.

En la tractorada del viernes se demostró, que “defendemos unas medidas con unas exigencias justas, como la simplifación de trámites administrativos, la protección contra el ataque de los lobos y apoyo al relevo generacional en el campo, para que nuestros hijos y sus familias puedan seguir viviendo del campo”.