La Guardia Civil ha detenido a un antiguo trabajador de una empresa de telefonía por contratar más de una veintena de líneas telefónicas a nombre de tres personas y dos empresas, si bien no se descartan otras posibles estafas.
El hombre, de 42 años y vecino de Santillana del Mar, también adquirió dos teléfonos de alta gama a nombre de una de las víctimas.
La Guardia Civil comenzó una investigación a finales del mes de agosto del año pasado al recibir una denuncia de una persona porque habían utilizado su documentación personal y de su empresa para la compra de terminales móviles.
En el trascurso de la investigación, la víctima recibió una notificación de una deuda de una financiera que le reclamaba más de 3.000 euros por el contrato de 16 líneas de telefonía móvil, así como por la compra de dos terminales móviles de alta gama.
Los agentes pudieron averiguar que si bien los contratos estaban a nombre de la víctima, la entrega de las tarjetas SIM y de los teléfonos correspondía a un domicilio de Santillana del Mar que nada tenía que ver con él.
Los agentes comprobaron que las contrataciones de estas líneas podían haber sido realizadas por un antiguo trabajador de una empresa de telefonía, utilizando su cartera de clientes para dar de alta las líneas telefónicas con la documentación de estas personas sin su conocimiento.
La Guardia Civil tiene constancia de la contratación de otras 10 líneas de telefonía móvil, lo que eleva a un total de 26 las contratadas a nombre de otras personas.
Por el momento, los perjudicados son tres personas y dos empresas, si bien la investigación continúa para esclarecer otras posibles estafas.
El 4 de marzo se localizó al presunto autor de estos hechos y fue detenido como presunto autor de los delitos de falsedad documental, usurpación de estado civil y estafa.
