Santoña.- La batería alta de San Martín sufre actos vandálicos y expolios desde hace más de un año

photo_camera CANTABRIA.-Santoña.- La batería alta de San Martín sufre actos vandálicos y expolios desde hace más de un año

La Asociación en Defensa del Patrimonio de Santoña ha denunciado que la batería alta de San Martín, declarada Bien de Interés Cultural (BIC), sufre actos vandálicos y expolios desde hace más de un año.

Por ello, ha solicitado al Ayuntamiento y a todos los partidos políticos que concurren a las elecciones municipales de Santoña que se tomen la medidas necesarias permitan terminar con "el vandalismo y los expolios" que está sufriendo la restauración de la batería que se realizó en 2008, con un coste de 400.000 euros.

En un comunicado, la asociación ha precisado que "en los últimos tiempos" se ha desmantelado el forro de planchas de cobre que cubrían los tejados de los edificios, por lo que las filtraciones de agua en su interior son ya constantes.

También se han realizado pintadas sobre las paredes del acuartelamiento y la mayoría los cristales están rotos.

Además, la agrupación dice haber comprobado que las labores de mantenimiento no se están llevando a cabo correctamente, pues una de las escaleras de acceso a la barbeta superior está completamente podrida.

Por otra parte, la asociación ha solicitado alcalde, Sergio Abascal, que las reparaciones se hagan empleando los materiales y sistemas constructivos acordes al diseño original de las edificaciones y no con los materiales empleados en la, a su juicio, "desafortunada" restauración realizada en diciembre de 2008, que "desvirtuó el espíritu de la fortificación" al introducir materiales y procesos constructivos ajenos a la fortificación original.

La restauración costó casi 400.000 euros al Gobierno de Cantabria, de los que el Ayuntamiento aportó 140.000. Desde su reinauguración en 2008, las instalaciones han permanecido cerradas, y "mal protegidas de los actos vandálicos y de los expolios".

La batería alta de San Martín fue vendida por el Ministerio de Defensa al Ayuntamiento de Santoña en 1973 y declarada BIC con categoría de Monumento Histórico en 1992.

Fue una edificación inicialmente planificada por las fuerzas napoleónicas, que dispusieron en la parte alta del fuerte de San Martín un sistema defensivo complementario. Posteriormente la batería fue modificada en 1859, estableciendo un acuartelamiento con polvorín y almacén y nuevas barbetas para la artillería.