El músico Jorge Pardo afea la "perversión del aprendizaje" musical que "ahoga" la creación de emociones

Jorge Pardo Quintet con el espectáculo " Banda Trance " correspondiente al ciclo Noches de Música de la UIMP
photo_camera Jorge Pardo Quintet con el espectáculo " Banda Trance " correspondiente al ciclo Noches de Música de la UIMP
El músico de jazz y flamenco Jorge Pardo considera que existe una "perversión en el camino del aprendizaje" musical en el que las cuestiones técnicas "parece que son lo más importante". Esto, a su juicio, incurre en una "vorágine de querer saber" que "ahoga el objetivo principal que es disfrutar y crear emoción" con la música.

"Está mal planteado, la música hay que gozarla, hacer disfrutar y luego, poquito a poco, ir rascando en las bases de la técnica y aprender a escribir y comunicarnos entre nosotros", ha matizado durante la clase abierta 'Una mañana con Jorge Pardo' que ha tenido lugar este miércoles en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

Pardo ha ilustrado estas valoraciones con su propia experiencia, de la que ha relatado que, el año que pasó en el Real Conservatorio de Madrid, "no fue tan interesante" como practicar con la música con sus compañeros. "Aprendí más tocando con mis colegas en la calle o en casa de alguno", ha apostillado.

En este sentido, ha ensalzado la "actitud de curiosidad" y de "amar la música" frente al aprendizaje de las instituciones. "Si amas lo que te propones te vas metiendo dentro. Si tu quieres aprender te buscas la vida", ha aseverado.

Por otro lado, ha puesto en valor la "educación en el ritmo" que, según ha lamentado, "se pasa por alto" en las academias porque "parece que se tiene que traer de casa".

Así, pese a que ha considerado que el ritmo es una "cuestión muy natural" y que "todo tiene una serie de ritmos", el músico ha afeado que la academia "le haya quitado importancia" por lo que el ritmo "se ha quedado más arrinconado".

Frente a ello, Pardo se ha referido a las músicas populares en las que "antes que nada hay que saber hacer ritmo" por lo que éste resulta "más trascendental". "Si no te educas en el ritmo te va a sonar rígido, es una de las claves más importantes en la música popular", ha añadido.

Por ello, el músico ha considerado que el ritmo es "un juego que hay que practicar continuamente" y ha puesto en práctica sus palabras con la interpretación de melodías de carácter binario y ternario para ilustrar a los asistentes.

Según Pardo, al igual que con el ritmo, el contrapunto también es necesario llevarlo a la práctica" con la "naturalidad que lleva su educación". Asimismo, el músico ha alertado contra el "peligro" que supone "traducir todo lo que se toca" a notas musicales para poder volcarlas en un pentagrama y que lleva a "aprender notas" pero no a "expresar lo que se tiene que expresar".

De este modo, Pardo ha mostrado a los asistentes las diferencias entre tocar la flauta desde la mera interpretación de un pentagrama a hacer una interpretación de un "quejío" a través de los instrumentos.

FLAMENCO COMO EDUCACIÓN Y JUEGO

Por otro lado, el músico ha puesto en valor la música flamenca como un arte "culto y armonía" que se encuentra "bajo la apariencia de una música ruda, tosca y salvaje" que, a su juicio, "puede eclipsar toda la complejidad del flamenco".

Así, Pardo ha señalado que, frente a la "tendencia" de pensar que hay "etnias o grupos sociales" más propensos a desarrollar unos conocimientos en torno al flamenco, lo que existe es una "cuestión educacional" en la que "se aprende jugando".

"Las familias flamencas dicen que el flamenco no se aprende sino que se lleva dentro pero no te das cuenta de que lo aprendes porque está en tu entorno. Los niños están jugando a eso en la calle y en casa", ha subrayado.

Así, el músico ha comparado a estos niños que si hacen "una patada por bulería cualquier percusionista se preguntaría cómo lo hacen" con algunos "grandes músicos" que, cuando se enfrentan a una bulería, "dan un paso atrás porque les es muy difícil".

Pardo ha relatado que, en su caso de "payo", la entrada a "ese club un poco privado" que supone el flamenco la llevó a cabo con "mucho esfuerzo". "No tienes a nadie en tu casa para jugar a ese juego y yo me he tenido que buscar la vida", ha sostenido.

Sin embargo, el músico ha destacado que en la actualidad existen diversos medios y plataformas para educarse y ha apuntado a las "claquetas flamencas" que se pueden encontrar en Youtube. "Te pones los cascos y vas entrenando tus contratiempos y te vas educando. La clave es ir a por ello imaginándolo en tu ritmo", ha concluido.